
Las conocidas como mujer jirafa o padaung son un grupo étnico que llama la atención por la costumbre que tienen de ponerse aros metálicos en el cuello (parece ser que son de latón). Los aros se los comienzan a poner las mujeres cuando son niñas y van progresivamente añadiendo más. El efecto visual es de un estiramiento del cuello.
Esta costumbre parece que comienza a los 5 años. Técnicamente no serían aros, más bien son bobinas que se van poniendo alrededor del cuello. Una vez que comienzan a ponerse los aros, no se los quitan para nada. En principio viven con ellos el resto de su vida haciendo todas sus actividades de esta forma.
Estas mujeres son conocidas por ser una atracción turística en Tailandia. No son originarias de allí, parece que pertenecen a tribus que huyeron de la guerra en Birmania. Se pueden leer muchas teorías de por qué llevan estos aros (como que les protegían de los leones y otras). Sin embargo, en entrevistas a estas mujeres hablan de un motivo estético, de cómo entienden la belleza en su cultura. Posiblemente el motivo actual de perpetuar esta tradición tenga mucho que ver con el dinero que obtienen del turismo.
¿Qué ocurre en el cuello de la mujer jirafa?
Sabemos por qué se ve el cuello tan largo gracias a radiografías que se han hecho del cuello de estas mujeres. En el año 1979 salió un articulo en el National Geographic publicado por el Dr. John M. Keshishian con el título “Anatomy of a burmese beauty secret”. Si nos fijamos en la radiografía de la derecha en la foto podemos ver lo que ocurre realmente. Al añadir progresivamente el metal alrededor del cuello, las dos clavículas y las costillas se van empujando hacia abajo por el peso del metal. Esto hace que parezca que hay un cuello más largo aunque realmente la columna cervical no se ve modificada.
En la radiografía se puede apreciar la deformidad de las primeras costillas y el descenso de las dos clavículas como si se hubiera empujado hacia abajo a todo el tórax. Al contrario de lo que mucha gente pensaba, las vértebras cervicales no sufren ninguna modificación. Esto tiene cierta lógica. Para poder separar las vértebras cervicales se tendría que traccionar con dos puntos de apoyo con tal presión que la piel no aguantaría. En los puntos de apoyo la piel se moriría y se abrirían heridas que impedirían el proceso.
¿El cuello de la mujer jirafa sufre? ¿Qué ocurre si se quitan los aros del cuello?
Existe el mito de que si una mujer jirafa se quitara las anillas del cuello se moriría por no poder sujetar su cuello. Hay casos de mujeres que se lo han quitado y no ha pasado gran cosa. Es lógico pensar que la musculatura del cuello estará muy atrofiada y las articulaciones cervicales tendrán dificultades para moverse. La flexo-extensión se verá muy mermada, sobre todo, al no haberse movido en tanto tiempo y la musculatura no sujetará mucho. Esto probablemente provoque importantes dolores de cuello durante un periodo largo hasta adaptarse a su nueva situación.
En entrevistas a mujeres jirafa cuentan momentos en los que se han quitado los aros para bañarse u otras situaciones y en ningún momento hablan de situaciones de riesgo para su vida. Más bien hablan de que se sienten desnudas, feas o incluso enfermas por no llevarlo. Parece más un tema psicológico que el problema físico que les puede producir. En definitiva, estas mujeres no se mueren al quitarse los aros como se ha especulado.