
Acudimos a la consulta con nuestro dolor de espalda o de cuello. Le hemos contado nuestro problema al médico y a continuación comienza el examen físico. Durante la exploración el doctor saca un martillo y nos golpea en algunas zonas del cuerpo para sacar los reflejos. ¿Qué está haciendo el médico? ¿Para qué sirve esto?
¿Qué son los reflejos?
El martillo sirve para valorar los reflejos. Para entender la información que nos puede aportar hay que entender lo que es un reflejo. Vamos a poner un ejemplo. Imaginemos que estamos cocinando y sin querer apoyamos un dedo en la sartén que está ardiendo. Automáticamente retiramos bruscamente la mano al sentir el quemazón.
Vamos a analizar qué es lo que ha ocurrido. Normalmente si queremos mover el brazo, en una parte de nuestro cerebro generamos la idea y la mandamos a otra parte del cerebro llamada corteza motora que va a activar la señal. Esta señal viaja por el cerebro, después por la médula y finalmente, a través de la raíz nerviosa y el nervio, llega al músculo que queremos mover. De esta forma pensamos en mover el brazo y finalmente lo movemos.
Volviendo al ejemplo, uno podría pensar que al notar que la sartén estaba caliente decidimos quitar la mano y, como explicamos antes, mandamos la señal desde el cerebro a nuestro brazo para hacerlo. Esto no ocurre así porque es muy lento y tardaríamos demasiado en quitar la mano del fuego. Entonces, ¿cómo funciona? Quitamos la mano rápidamente gracias a los reflejos, como ahora veremos.
Los receptores de la piel detectan el exceso de calor y el daño que nos está haciendo en el dedo. Estos sensores mandan una señal que viaja por el nervio sensitivo hasta la médula espinal que está en la columna. La médula va a interpretar este daño y automáticamente manda la señal a los músculos que van a retirar la mano del fuego. A esto se le llama arco reflejo y es una de las funciones que tiene la médula espinal.
¿Por qué usamos un martillo para los reflejos?
En el ejemplo que hemos puesto hablamos de quitar la mano para evitar una quemadura pero hay más tipos de reflejos. Vamos a poner más ejemplos. Si estamos andando y pisamos una piedra, nuestro pie se tuerce y la posición del tobillo cambia bruscamente. Los sensores que están en los ligamentos de la articulación del tobillo detectan esto y activan un arco reflejo para contraer los músculos que estabilizan otra vez el pie y el tobillo. Sin este reflejo, en vez de un esguince o un susto, tendríamos una fractura grave en el tobillo.
Hay otros sensores que están en los tendones de los músculos y que activan el arco reflejo cuando el tendón se estira y colabora en el control de la contracción. Este reflejo es el que utilizamos para realizar parte del estudio neurológico en la consulta. Con el martillo damos un golpe seco en el tendón y provocamos la contracción del músculo. Es un gesto sencillo que nos permite evaluar la vía nerviosa que hemos descrito antes.
Si el reflejo es normal sabemos que el receptor, el nervio sensitivo, la médula y el nervio motor que participan están sanos. Pero no solo eso. El reflejo puede estar aumentado, disminuido o incluso ausente y cada uno tiene su significado. Además, al tener dos brazos y dos piernas, podemos comparar un lado con el otro, lo que da más valor a la prueba.
Los reflejos los podemos tomar en diferentes tendones del cuerpo como puede ser por ejemplo el codo o el tendón de Aquiles. Cada reflejo explora una vía nerviosa diferente y las conclusiones tienen un sentido diferente en cuanto a la causa y localización del daño que estamos buscando.
En resumen, tomamos los reflejos con un martillo para ayudarnos a explorar las vías nerviosas que van y vienen de los brazos y las piernas a la médula espinal. En un post explico el significado concreto de cada reflejo que se explora en brazos y en otro los reflejos en las piernas.
Ramón says
Querido Sr. Doctor Serrano Sáenz de Tejada
En noviembre tuve un episodio de lumbociatalgia bastante fuerte por lo que tuve que estar ingresado en el hospital durante tres días.
Durante ese tiempo me hicieron muchas pruebas y me diagnosticaron una hernia discal L5 S1 con afectación S1. A consecuencia de dicha hernia tengo el Reflejo Aquíleo abolido, además de parestesias y debilidad muscular sobre todo en la zona del tobillo y gemelo de la pierna izquierda.
Quería comentarle que al final el Neurocirujano decidió operar dicha hernia hace dos meses, ya que existía una afectación radicular importante, pero después de la cirugía y a día de hoy sigo sin recuperar dicho reflejo, y parece ser que no lo voy a recuperar, ya que parece ser que tengo una lesión permanente de la raíz.
Sr. Doctor, si es Usted tan amable quisiera que me informara, si dicho reflejo es importante, y si al final no lo recupero, que gravedad y como me puede afectar en mi vida diaria, y si a consecuencia de ello me puede limitar en el trabajo (Vigilante de Seguridad), ya que tengo que estar muchas horas de pie, aunque actualmente estoy de baja médica.
Muchas gracias doctor y siga usted así, que nos hace mucho bien.
Un saludo.
Dr. Serrano Sáenz de Tejada says
Hola Ramón, gracias por tus palabras. Cuando se tiene una lesión de la raíz S1 de lo primero que suele desaparecer es el reflejo aquileo. Perder el reflejo aquileo no tiene mucha relevancia, de hecho en edades avanzadas desaparecen sin haber lesión. Es más trascendente como queda la fuerza y la resistencia del músculo. Cuando se lesiona una raíz S1 puede ocurrir que los músculos como los gemelos se cansen antes de lo normal y no rindan igual. En el post sobre el músculo que ha sufrido una denervación lo explico (te dejo enlace). En resumen, lo que tienes que recuperar es la fuerza y, si lo consigues, el reflejo es posible que no vuelva pero no tendrá trascendencia. Ánimo con la recuperación. Un saludo.